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Madrid, la capital española, ha sido escenario de un total de 632 manifestaciones en lo que va de año; el doble de la cifra registrada el mismo periodo del año pasado, que cerró con un registro de 3419 protestas.

Madrid vivió "mucha conflictividad" desde principios de 2013 hasta el pasado 15 de febrero, aseveró el sábado la delegada del Gobierno de Madrid, Cristina Cifuentes, que, al respecto, calificó de "fuerte" el comienzo del año.

En torno a la alta cifra de "manifestaciones o concentraciones", Cifuentes reclamó que la "difícil y complicada" situación económica y el "cabreo ciudadano" por distintos casos de corrupción política fueron las principales razones de las movilizaciones de los madrileños. 

Cifuentes, al considerar que su cargo es "hacer compatible" el derecho de manifestarse con el de "mantener una ciudad donde se pueda circular y habitar", instó a la búsqueda de medidas para regularizar la vida ciudadana, sobre todo en el centro de la capital, que se ha convertido en centro de la mayoría de las protestas.

La "inmensa mayoría de las manifestaciones fueron pacíficas" dijo la autoridad autonómica para luego asegurar que los casos que terminaron en violencia con enfrentamientos policiales no fueron muchos.