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El Observatorio de Derechos Humanos (HRW, por sus siglas en inglés) ha acusado a la Policía canadiense de violar y abusar a las mujeres indígenas de ese país, informa este domingo PressTV. 

Sin embargo, la respuesta indiferente de las autoridades canadienses respecto a las acusaciones del HRW ha ocasionado críticas posteriores contra el Comisionado de la Policía Montada de Canadá (RCMP, por sus siglas en inglés), Bob Paulson, y contra el Gobierno del primer ministro Stephen Harper por su incapacidad a la hora de hacer frente a las reivindicaciones.

El grupo de derechos humanos ha hecho hincapié en la necesidad de una investigación sobre las denuncias formuladas contra el RCMP.

Según el Gobierno de Ottawa, ya que Canadá es un Estado demócrata, el Gobierno debería quedar exento de escrutinio, lo que a juicio del HRW y otros grupos pro-DDHH, es necesario.

Los líderes indígenas han pedido a las organizaciones de derechos humanos supranacionales y a los partidarios de la autodeterminación aborigen seguir denunciando el abuso de las autoridades canadienses.

Autumn Eaglespeaker, una de los portavoces de los nativos canadienses, quejándose del abuso que ejerce la Policía local con los indígenas, acusó la semana pasada al Gobierno de Canadá de "erosionar completamente la democracia".

Anteriormente, Amnistía Internacional (AI) había condenado a las autoridades canadienses por incumplir las promesas contraídas respecto a los derechos de los pueblos indígenas, ya que, en opinión de dicho organismo, ese sector minoritario del pueblo, con una población de más de un millón de personas afronta una "crisis de derechos humanos".